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El concepto de offshoring se ha vuelto cada vez más popular gracias a la rápida globalización que están experimentando las grandes empresas.
El offshoring se refiere a la deslocalización que hace una empresa cuando traslada sus sistemas de producción a otro país. Las empresas se ven atraídas hacia la idea de reubicarse en otros territorios debido a las ventajas salariales y costos. Por ejemplo, las empresas europeas trasladan sus fábricas y líneas de producción a América o Asia.
BENEFICIOS DEL OFFSHORING
Como toda estrategia empresarial, el traslado de negocios y empresas llega con una serie de beneficios, por ejemplo:
- Contribuye a la contratación de mano de obra barata.
- Permite abrir un nuevo mercado, lo que implica la oportunidad de aumentar ventas en el nuevo destino.
- Disminuye los costos de fabricación, lo cual permite ofrecer productos más económicos al cliente e incluso obtener más ganancias.
INCONVENIENTES DE LA DESLOCALIZACIÓN
Así como existen grandes beneficios en esta estrategia de deslocalización, hay algunos inconvenientes a considerar, por ejemplo:
- Posibilidades de que la producción pierda calidad.
- Posible pérdida del control de la compañía.
- Dificultad para encontrar empleados cualificados para desempeñar las tareas propias de la empresa.
- Choque cultural, diferencias lingüísticas y complicaciones en la comunicación y modus operandi en las empresas.
OFFSHORING EN MÉXICO
Actualmente, en México el offshoring es una realidad y tan sólo en 2018 logró 32,694 millones de dólares de IED (Inversión Extranjera Directa). A pesar de su descenso en el índice de inversión extranjera, continúa sosteniendo gran parte de su economía debido a esto.
Claudia Jañez, presidente del Consejo Ejecutivo de Empresas Globales (CEEG) ha declarado que las empresas globales continuarán invirtiendo en México. Afirmó que para el periodo que comprende de 2019 a 2021 aumentará el flujo “porque creemos en este país”.
Existen dos elementos principales que fortalecen al país: la red de tratados comerciales internacionales y el mercado interno. El primer factor es el que representa un gran atractivo para la inversión extrajera en nuestro país.
Las empresas globales representan el 10% del PIB, 11% de las exportaciones, 40% de la IED y 500 000 empleos directos. Igualmente, las empresas trasnacionales significan un millón quinientos mil empleos indirectos que afectan positivamente a la economía mexicana.
EMPRESAS MEXICANAS EN EL MUNDO
Las grandes empresas nacionales son la ventana de México al mundo, pues son embajadores al mostrar la calidad mexicana. Según la consultora Boston Consulting Group (BGG), México es el país con más empresas trasnacionales en Latinoamérica. Son 28 las empresas mexicanas que en conjunto registran ingresos por más de mil millones de dólares anuales. Este ingreso supone el más grande de entre sus competidores, los cuales son Brasil, Chile y Colombia.
Las empresas mexicanas tienen el compromiso de impulsar el crecimiento económico del país por medio de sus labores. La generación de empleos, capacitación del capital humano, innovación tecnológica y responsabilidad ambiental recae sobre ellas. Un ejemplo de las empresas mexicanas que significan un gran crecimiento en México y que se han deslocalizado es IMCC.
La Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC) representa el 1.4% del PIB y destaca como una de las mayores empleadoras. De acuerdo con su reporte anual: IMCC, Comprometidos Contigo 2018, cuentan con 97 mil empleados directos y un millón indirectos.
De continuar por el mismo camino de inversión extranjera y deslocalización en México, la economía podría tener un crecimiento exponencial. Ahora sólo resta mantenernos informados y listos para participar en lo que se requiera para aportar a la economía nacional.
