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Ser freelance es tener tu propio horario, decidir con quienes trabajar, qué hacer y adaptarte sólo a tu estilo. Conoce los pros y contras que debes tomar en cuenta antes de volverte freelance.
Ser freelance es tener la capacidad de trabajar de forma autónoma. Implica no tener que ajustarse a un horario determinado o políticas de empresa porque eres tu propio jefe. Es la oportunidad perfecta para establecerte tus propias reglas, mismas que te llevarán al triunfo y al éxito profesional.
Pero no todo es miel sobre hojuelas, también hay riesgos que tienes que estar dispuesto a asumir. Encontrar tu propia cartera de clientes, demostrar que tu trabajo es único y no recibir la bonificación económica correcta. Estos son algunos inconvenientes por los que podrás pasar si no sabes cómo vender tu nombre de forma autónoma.
¿Cuáles son los pros y contras de ser freelance?
Ser un trabajador autónomo es prestar servicios a terceros a cambio de una compensación económica. Ante todo debes ser ordenado, separar tus actividades personales y laborales y ahorrar dinero para emergencias. No obstante, antes de optar por esta modalidad de empleo será bueno que sepas sus ventajas y desventajas.
Ventajas
Si realmente te describes como una persona ambiciosa, determinada, independiente y organizada este tipo de trabajo es para ti. Dentro de las ventajas está la reputación que adquirirás si haces tu trabajo de forma impecable. Esta forma de trabajo te motiva a estar lo suficientemente capacitado para hacer todo por tu cuenta.
Tu rango de clientes será enorme porque va desde pequeñas empresas que acaban de empezar hasta grandes marcas ya establecidas. Otra ventaja es la flexibilidad en los horarios y en seleccionar los trabajos que te gusten y rechazar los que no. Una ventaja es la comunicación directa con la empresa pues aumenta la calidad de respuesta y disminuyen los malentendidos. Por último, el venderte a ti mismo te dará más confianza y seguridad.
Desventajas
El que es freelance tiene que gestionarlo todo, desde el proyecto en sí, hasta mantenerse actualizado con respecto a sus conocimientos. Debes hacer por tu cuenta todas las tareas financieras y administrativas. También tienes que dedicar tiempo a auto-promocionarte para conseguir clientes. No tener un salario fijo significa que tienes límites pero si te pones a trabajar arduamente esto no será un problema para ti. Convertirte en tu propio jefe significa no tener garantía de trabajo, seguro médico, aguinaldo o poco dinero para irte vacaciones.
Entonces, podemos resumir esto en una lista de pros y contras que supone ser freelance:
Pros:
Flexibilidad
Control
Ingresos ilimitados
Multi áreas de trabajo
Plataformas para conseguir empleo
Contras:
Trabajo solitario
Sin garantías
Mayor responsabilidad
Equipo propio
No vacaciones
Puede que te estés planteado la posibilidad de convertirte en un trabajador independiente pero aún no te hayas animado. Recuerda que el trabajo freelance es de libertad, ser organizado con tus clientes y tener claro tu modelo de negocio. Esas son las claves para el éxito de tu proyecto. Te recomendamos contar con un sitio web profesional y redes sociales como Instagram para la difusión a tu marca.
Antes de comenzar a ser freelance debes estar preparado para emprender, considerar y analizar una serie de tópicos y sobre todo, lanzarte a la aventura. Debes considerar dónde vas a trabajar, si tendrás socios, conocer un buen contador y un médico de cabecera. Te recomendamos leer e informarte de todo lo que necesitas antes de dar el salto y establecerte por tu cuenta.